Debido a la inhibición significativa o completa del crecimiento, la demanda de agua disminuye. El riegose limita al mínimo necesario, tanto como para no secar las raíces y hacer que las hojas se marchiten.La regla es que es mejor secar que rebosar.
En invierno, las enfermedades fúngicas, incluida la pudrición de la raíz, se desarrollan con mucha facilidad. Cuando se notan síntomas perturbadores, a menudo es demasiado tarde para ser rescatado.Reducimos la fertilización de manera similar
Basta con utilizarlos una vez al mes en la mitad de la dosis recomendada.Esta frecuencia es suficiente para las necesidades de la planta, y al mismo tiempo no estimulará su crecimiento.Las especies que florecen en invierno como ciclamen, saintpaulias, azaleas, hipeastrum y kalanchoe son una excepción. Para garantizar una floración exuberante e ininterrumpida, la tierra de las macetas debe mantenerse constantemente ligeramente húmeda y fertilizarse cada 10-14 días con fertilizante para plantas con flores.