Un factor muy importante en la condición del suelo es su pH. Para la mayoría de las especies de hortalizas cultivadas, debería estar entre 6,5 y 7,0. Lo mejor es comprobar el nivel de pH cada año o cada 2 años.Si es demasiado bajo (4,5-6,0), el suelo debe encalarse
Este tratamiento incide en su fertilidad mejorando sus propiedades físico-químicas y biológicas, aumentando la absorción de fósforo, potasio y magnesio y microelementos, reduciendo la acumulación de metales pesados por las raíces de las plantas y acelerando la descomposición de las sustancias orgánicas.
Sin embargo, conviene recordar que dosis demasiado altas de calcio limitan la absorción de fósforo y hierro por parte de las plantas, necesarios para su correcto desarrolloDependiendo del tipo de suelo, Se utilizan diferentes fertilizantes de calcio. El óxido de cal (acción rápida) es insustituible para suelos pesados, y el carbonato (acción lenta) para suelos arenosos.