Los gatos son criaturas curiosas. Les encanta oler y revisar todo en nuestra casa. No es de extrañar que estén interesados en nuestras plantas y flores. Algunos de ellos son venenosos. Si un gato come una planta de este tipo, puede enfermarse o incluso morir. Los gatos jóvenes y curiosos son los más vulnerables. Así que vale la pena comprobar si las plantas que tienes en casa son seguras y no dañarán a tu mascota.
Los síntomas más comunes incluyen convulsiones, vómitos, diarrea, convulsiones, dolor abdominal, pérdida de apetito, inflamación de la lengua, coloración clara de las encías, confusión, enrojecimiento de la cara, aumento de la salivación y dificultad para tragar.
Aloe: causa irritación intestinal, somnolencia, vómitos intensos, temblores corporales y dificultad para moverse y respirar
Alocasia: provoca babeo, dificultad para tragar, irritación de la boca y obstrucción de las vías respiratorias
Azalea: provoca vómitos, diarrea, salivación, f alta de coordinación, debilidad, parálisis de las extremidades, debilidad, coma, convulsiones, arritmias e incluso la muerte
Ficus: causan pérdida de apetito, babeo, vómitos, diarrea, enrojecimiento y dermatitis
Ciclamen - provoca salivación, vómitos, diarrea y, con un alto consumo: problemas cardíacos, convulsiones e incluso la muerte
Monstera: causa dificultad para respirar, problemas para tragar, babeo, calambres y vómitos, y si se consume en exceso: insuficiencia renal, coma, convulsiones e incluso la muerte
Oleander: causa irritación intestinal y estomacal, latidos cardíacos anormales e incluso la muerte
Clivia: causa diarrea, vómitos, daño a la mucosa intestinal, sangrado del sistema digestivo, daño al hígado y los riñones, e incluso provoca la muerte
Lirio de la paz: provoca irritación de los labios y la lengua, salivación, espuma en la boca, dificultad para tragar y vómitos. Adicionalmente, la intoxicación se manifiesta quemando la boca del gato.
Si sospecha que su gato se ha envenenado, comuníquese con su veterinario lo antes posible e intente encontrar la fuente del envenenamiento. Comprueba que todas las plantas que tienes en casa son seguras. Averiguar sobre la fuente del envenenamiento tiene una ventaja adicional. Le ayudará a decidir cuál es el mejor tratamiento.