Ciertas reglas de disposición son universales, independientemente de si estamos hablando de decorar una casa o un jardínAquí y aquí debe tener en cuenta la posición en relación con el sol, las proporciones, la desviación desde el nivel del suelo, etc.
El diseño efectivo se caracteriza por el uso óptimo del espacio. Al igual que en casa, todo tiene que estar en su lugar. El compostador debe estar fuera del camino, el resto esquina en un jardín tranquilo y la terraza en un lugar soleado.De esta forma se crean espacios independientes que, por un lado, conservan su carácter individual, y por otro lado, conviven de forma coherente con todo el entorno.
En tales circunstancias, se hace necesario dividir el espacio con el uso de elementos disponibles de arquitectura de pequeños jardines, setos, suposiciones hechas de plantas ornamentales. Sin embargo, lo más importante no es el número de elementos de separación, sino que estén en su lugar. ¿Cómo comprobarlo? La forma más sencilla es utilizar un lápiz y una hoja de papel, sobre la que aplicamos un terreno a escala.Donde las líneas divisorias se superponen, deberá ingresar un divisor. Queda por decidir qué tan alto debe ser y cuánto tiempo.
Los elementos de separación no necesitan formar un muro defensivo para separarse de manera efectiva.Por lo general, un pasaje simbólico acentuado por una simple cerca de estacas, una línea de plantas o un caminoDe todos modos, las fronteras se pueden marcar no solo con elementos espaciales (tridimensionales), sino también con elementos planos, que difieren en color y textura, el mejor de los cuales es un ejemplo son los materiales utilizados para el endurecimiento de pavimentos.La transición de una zona a la siguiente se puede marcar con escaleras o un umbral, especialmente si el terreno es irregular.
Los elementos de separación pueden ser permanentes o temporales, instalados estacionalmente según sea necesario. La forma más fácil de marcar el borde es colocar plantas en macetas. Las plantas o pastos de hoja perenne son muy adecuados para este propósito. Entre las primeras, podemos recomendar la tuya, el tejo, el boj, entre las hierbas cabe mencionar la juncia, la festuca o la hakonechloa esbelta.
Los elementos de separación grandes, como paredes y setos, rompen los ejes de visualización. Sin embargo, son útiles, porque protegen del viento, dan sombra y protegen nuestra privacidad. Levantar un muro de piedra natural, ladrillo u hormigón da un efecto de utilidad inmediato, aunque puede resultar laborioso.
Nada menos que obtener un seto de esquejes jóvenes. La diferencia es que una valla verde es más barata. En la unión de dos zonas también se justifica la presencia de una pérgola o portillo. Entonces nadie tendrá dudas de que estamos entrando en un espacio diferente.