Los días más largos y cálidos fomentan visitas más frecuentes al jardín . Vale la pena usar este tiempo para una encuesta de primavera y una evaluación de la invernada de árboles frutales y arbustos. En invierno, las plantas están expuestas a la influencia de muchos factores climáticos desfavorables, que incluyen para congelar.
Las caídas significativas de temperatura pueden causar que varias partes de las coronas se congelen. Las heladas fuertes pueden ser especialmente peligrosas para los árboles más viejos, que a menudo se infectan con enfermedades y debilitan su fructificación.
Comprobamos si las ramas no se han roto bajo el peso de la nieve. Si este es el caso, corte toda la parte rota con una pelota y lubrique la herida con un agente protector de heridasCada corte realizado durante este período es particularmente peligroso para los árboles, porque el frío El clima y las lluvias frecuentes son propicios para la electrocución. Varios patógenos.
Recuerde proteger las heridas después de cada corteBajo el peso de la nieve, es posible que algunas ramas también se hayan doblado. Si no queremos quitarlos, será necesario sujetar o amarrar firmemente los brotes. La corteza congelada es un problema aparte.
Al final del invierno se pueden ver bastante bien todo tipo de grietas en el tronco de los árboles más grandes. Si la corteza no sobresale, solo necesita untarse con una preparación adecuada.No se debe subestimar el problema, porque el agua se acumulará en la fisura resultante, que es un excelente sustrato para el desarrollo de enfermedades fúngicas de la corteza y la madera.Esta es una enfermedad común de las especies de piedra
Por lo tanto, es recomendable mirar todo el tronco hasta la base de las extremidades.En árboles más jóvenes, comprobamos que no hayan sido dañados por roedores.La protección adecuada y rápida de las heridas resultantes es de vital importancia para el crecimiento posterior de la planta.
No descarte un árbol dañado de inmediato. No es raro que los árboles con corteza muy carcomida curen las heridas por sí solos y después de unos años ni siquiera se vean rastros de daños anteriores.En el caso de los arbustos, el problema después del invierno puede ser una superposición excesiva de los brotes a los lados.Esto suele deberse a las fuertes nevadas, que doblan las ramas delicadas.
Si los brotes no tienen más de 2 o 3 años, ate el arbusto con una cuerda para que las ramitas no queden en el suelo. Si los brotes son viejos, córtelos cerca del suelo para que puedan crecer nuevos crecimientos valiosos.